La felicidad no se basa en una vida. Se basa en momentos. Ni
siquiera se basa en los demás, se basa en uno mismo. Mira las cosas de una
manera diferente, cambia tu perspectiva. Comprende que no necesitas la ayuda de
nadie para poder ser feliz. Comparte secretos y déjate ser completamente tú
ante los demás. No mires hacia el pasado con rencor ni con vergüenza. Vive cada
día como si te fueras a ir al siguiente. Aprende de tus errores y comete lo que
te de la gana. No cambies por los demás, aprende a quererte. No odies. Tampoco hieras. Solo ama.
La felicidad se basa en momentos vividos. Algún día mirarás
hacia atrás y al recordar, solo te acordarás de las cosas buenas, de los buenos
ratos. En ese momento la sentirás.
Me gusta mucho tu blog, me siento identificada con tus entradas :)
ResponderEliminarSi quieres pásate por el mio ^^
Un beso!