lunes, 6 de mayo de 2013

Los días hacen semanas.


Hacía ya días en los que no me mirabas de esa manera, en los que no me levantaba tan temprano y en los que no encendíamos la radio mientras desayunábamos. Hacía ya unos cuantos días en los que tú no te metías en mi habitación mientras estaba estudiando y me distraías ni en los que íbamos a visitar a tu madre, de hecho, ya ni me acuerdo cuando fue la última vez. Días que se pasaron lentos, del mismo tipo de lentitud con la que tú respondes a las preguntas importantes que te hago y con la que yo finjo que me interesa lo que me estás contando. Fueron 25 días, exactamente. Y ni uno de ellos me olvidé de que hoy te tocaba planchar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario